Preso político, prisionero de guerra, prisionero ilegal, reo, como usted le quiera llamar. Otro hombre -en este caso- viviendo tras las celdas un verdadero infierno en la tierra. La descripción de la historia de este hombre no es -ni de manera cercana- un argumento para una película de García Ferré o Walt Disney. Con el debido cuidado y respeto a su persona, aqui Claudio Kussman hace un breve comentario acerca de lo que un compañero del "hospital" Penal Central debió enfrentar.